sábado, 19 de octubre de 2013

Gurruño





Cuando deje de creer me habré perdido,
si algún día me extravío y pienso que me di sin razón,
que sufrí por sufrir o acaso que perdí,
o bien pensase  que me di por nada;
qué coño quedará de mí?

No seré yo quien soy,
y si quedan restos será un gurruño
hecho de hierro torcido,
pellejo que camina por su armazón regido,
metal muerto.

Cuando deje de desear tenerme a mi lado,
pegado y respirando sobre mí,
no seré yo y me haré como la mayoría;
legión que pisa el mundo sin vivir.

Si algún día no se sacude mi espíritu ante mi amante
y pierdo el deseo recalcitrante
de abrir la boca y aspirarte a besos el aliento,
si me hace rutina espatarrarme para que bien abierta de piernas
me veas ante ti,
qué coño será de mí?

No seré yo quien soy,
y si quedan restos será un gurruño
hecho de hierro torcido,
pellejo que camina regido por su armazón,
metal muerto, muerto, muerto.



Sin correción. A.
Foto de la Guerra Civil- Toledo-

En tornasol





Amarillo tirando a verde son los mimos
que me guardo en el dobladillo
del vestido de Domingo
esperando que me invites a las feria.

Amarilla me pongo cuando me dejas por…
No se qué
y cuando me lo explicas es aún peor
porque no entiendo ese por qué.

Ya no es rojo mi enfado,
si no un enojo amarillento
en pretensión de llegar a un verde sencillo,
que concluya en el mirarnos tu y yo
y sosegarnos del todo al reinarnos.

Adquieres entonces tú y como respuesta
un tono amarillento ceniciento,
tirando a un verde ahogado en esperanza
y a la vez sediento de vivir,
que es como el contratiempo de habernos conocido;
y nos lleva a tragar un amarillo chantaje que no es nuestro,
amarillo egoísmo ajeno,
amarillo proyectado en lo que en otros despiertas
y ciegos, no te ven cómo eres:
Azul.
Azul cielo.

Cuándo vas a terminar de afianzar tu azul celeste sobre mi azul relámpago?

Yo azul tormenta precipitado en Verano…
lamo siena tostada
y soy capaz de hacer con mi lengua magenta;
incluso negro humo que de a luz
un universo nuevo para ti;
donde sólo tengamos que latir,
como hacemos al vernos.

Y los besos sean:
Rosa bocado,
blanco pureza,
rojo forjado en carmín
y violeta libre…

Apelo, amante mío, a tu azul cielo.

Imagen tomada de Jos33llo 2012.

A.
(Siempre he pensado que este poema sólo lo entiende quien pinta. Sin corrección)