viernes, 24 de febrero de 2012

Hechizo



Voy a derribar con mi aliento el muro de escarcha que nos separa,          
haré  despiertes al calor de mi sexo que guarda el ansía que de tí tengo.
 

Voy a sacar de entre mis piernas un dragón!
Y a azuzarlo para que a base de encenderte con su fuego
te robe fuerzas y haga de esa resistencia tuya una debilidad
que te conduzca a clavar tus rodillas doblegándote ante mi voluntad. 


Voy dispuesta a que ardas de nuevo por mí
avivando este fuego que aúnque quieras obviar
va a devorarnos siempre, siempre.
 

Voy a cederte el valor justo para que no te temas,
para que no te temas,
para que sepas que puedes posar tus pies sobre esta tierra mía     
sin hacerte daño.

Lanzaré un embrujo potente como un silbido tan agudo
que sólo las bestias podrán oirlo claro
y que se hará susurro cuando llegué a tí, amortiguado,
más tú no podrás percatarte porque estarás dormido.

Te estoy tocando ya con el deseo que en mí despiertas
y albergo en mi vientre desde el primer día que pose mi mirada sobre tí.
 

Voy a insuflarte el don del recuerdo,
para que sepas quienes somos en verdad...

Y cuando sepas lo que debes  recordar,
te haré encender como una antorcha,
usando un susurro que se deslice entre el telón que te hace ciego,
llevándote a que recuerdes el hechizo que sólo fuí capaz de hacer
con terciopelo de la prosa que me inspiras.

Te canto en cada palabra,
y cada una de ellas hacen de espejo que refleja esa belleza tuya,
pero también es lupa que escudriña
y te ve sin verte y me dejará contemplarte cuando el tiempo
de modo irremediable, se apodere de tu tersura.

Voy a sacar de entre mis piernas un dragón!
 

Sembrará con fuego un ansía que te haga consciente
de que a tu boca le falta mi saliva,
de que a tus manos le faltan mis pechos,
a tu sexo mi sexo, a tu paso mi compás.

Pareciera hiciese un siglo que no me tocas,
pareciera que estuvieses dispuesto a vivir sabiendo
del deseo que se tienes que te lama, que te abrace;
sabiendo del deseo que te tengo y al que no renuncio,
buscando me complazcas.
 

Sabes que ya apenas recuerdo a qué hueles?

Lanzaré un embrujo potente como un silbido tan agudo
que sólo las bestias podrán oirlo claro
y que se hará susurro cuando llegué a tí, amortiguado,
más tú no podrás percatarte porque estarás dormido.

Ven!

No hay comentarios:

Publicar un comentario